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Esta planta herbácea perenne, que sólo crece en las regiones tropicales del mundo, es conocida por ser una aliada de nuestro hígado, dañado con demasiada frecuencia por el alcohol, el tabaco o los medicamentos. ¿Qué contiene esta planta? ¿Cómo actúa? ¿Cuáles son sus beneficios? ¡Te lo contamos todo!
El desmodium es una planta trepadora cuya particularidad es enroscarse alrededor de palmeras de aceite o árboles de cacao, por lo que se llama desmodium (desmos = enlace) adscendens (ascenso) en latín. De unos 50 cm de altura, las hojas del desmodium parecen las de un trébol y sus pequeñas flores malvas se convierten, tras la floración, en pequeños granos cubiertos de pelos (apodados primos) que se adhieren a los animales o a los pantalones de los caminantes y se esparcen por el campo.
Originario de África Occidental, su cultivo se extendió a América Latina, probablemente con la llegada de los primeros esclavos, y después a las zonas ecuatoriales húmedas y al Pacífico, donde se utiliza mucho en medicina tradicional.
En Camerún se utiliza para tratar trastornos hepáticos, en Ghana es conocida para tratar problemas de la piel (eccemas) y alergias respiratorias, y en América Latina es un tratamiento básico para las convulsiones, la malaria y la epilepsia.
Hubo que esperar hasta los años setenta para que el Dr. Pierre Tubéry y su esposa Anne-Marie Tubéry introdujeran el Desmodium en Francia, lo que encandiló a los investigadores científicos. Rápidamente demostraron sus propiedades hepatoprotectoras.
Los distintos principios activos que se encuentran en las partes aéreas (tallo, hojas) del Desmodium y en los tratamientos fitoterapéuticos son: flavonoides (entre ellos la vitexina), alcaloides isoquinolínicos, ácidos grasos, saponósidos, antocianósidos y derivados de la triptamina.
Hepatoprotector
Es por su acción sobre el hígado por lo que es más conocida y lo que le ha valido el apodo de "planta aliada del hígado". Actúa aumentando la resistencia de las células hepáticas durante las inflamaciones tóxicas (intoxicación medicamentosa) o infecciosas (infección viral aguda o crónica) o en caso de insuficiencia hepática. A continuación, permite normalizar las transaminasas (enzimas cuyos niveles aumentan durante un daño celular) y, por último, actúa en la regeneración de las células hepáticas dañadas.
A menudo se propone como acompañamiento de la quimioterapia, para atenuar sus efectos secundarios. La planta está reconocida por la Agence Nationale de Sécurité Sanitaire de l'Alimentation (ANSES) como hepatoprotector, pero aún no está registrada en la farmacopea francesa.
Un estudio belga de 20131 investigó la actividad antihepatotóxica del desmodium sobre el daño hepático en ratas y llegó a la siguiente conclusión: "La decocción acuosa de D. adscendens mostró un efecto protector en ratas contra la D-galactosamina y el daño hepático inducido por etanol".
Antiasmáticos y antialérgicos
Aunque los médicos de Ghana han utilizado las hojas de desmodium durante siglos para combatir el asma, desde entonces se ha demostrado que el desmodium inhibe la acción de la histamina sobre el músculo liso y disminuye la constricción de las vías respiratorias y los pulmones. Varios estudios123 han demostrado que el Desmodium tiene un efecto relajante sobre el tejido pulmonar y que mejora la broncoconstricción.
Por último, también se dice que el Desmodium ayuda a tratar los ataques repentinos de alergia, como los ataques de asma, el angioedema y ciertas alergias alimentarias.
Relajante
Su acción sobre los músculos lisos hace que el Desmodium sea útil en casos de contracturas musculares, dolores, calambres o espasmos musculares. También se utiliza durante el parto o el posparto para reducir la fuerza de las contracciones uterinas o en casos de convulsiones o epilepsia.
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La dosis prescrita de desmodium depende de la forma en que se tome.
La dosis habitual para un adulto medio (60 kg) es de
En caso de trastornos hepáticos, la dosis habitual debe tomarse durante 2 a 8 semanas en función del restablecimiento de los parámetros biológicos normales.
En el tratamiento del asma o las alergias, la dosis recomendada puede aumentarse a 20 g de planta seca al día o equivalente y la eficacia máxima sólo se alcanza tras 3 semanas de tratamiento, por lo que hay que tener cuidado de no interrumpirlo antes de tiempo.
Por último, para prevenir los efectos secundarios de la quimioterapia, el desmodium debe tomarse 2 días antes y al menos 10 días después del tratamiento.
No se han descrito efectos secundarios graves derivados de la toma de desmodium. Sólo se han notificado ocasionalmente trastornos digestivos leves (náuseas, diarrea).
No obstante, como medida de precaución, el desmodium no se recomienda a las mujeres embarazadas o en período de lactancia.
1. MAGIELSE, J. et al. 2013. Actividad antihepatotóxica de una decocción cuantificada de Desmodium adscendens y d-pinitol contra el daño hepático inducido químicamente en ratas. Revista de Etnofarmacología. 146, 1 (mar. 2013), 250-256.
2. ADDY, M.E. y BURKA, J.F. 1990. Efecto de la fracción 3 de Desmodium adscendens sobre las contracciones del músculo liso respiratorio. Journal of Ethnopharmacology. 29, 3 (julio de 1990), 325-335.
3. ADDY, M. E. & BURKA, J. F., 1988, Effects of Desmodium adscendens fractions on antigen-and arachidonic acid-induced contractions of guinea pig airways. Can. J. Physiol and Pharmacol, 66: 20-825.
4. ADDY, M. E. & AWUMEY, E. M. K., 1984, Effects of the extracts of Desmodium adscendens on anaphylaxis. J. Ethnopharmacol, 11: 183-192.